El Museo Nacional de Arte Mexicano abrió sus puertas a su galería más popular en el barrio West Side de Pilsen de Chicago, la exposición del Día de los Muertos. En lugar de entrar en un cuarto luminoso, los visitantes se encuentran con la oscuridad este año.

Con solo cinco esculturas de niños sosteniendo las flores exhibidas, el coordinador Mario Hernández dijo que muchos de los visitantes “se callan por completo cuando entran al espacio, lo que generalmente nunca sucede”.

Hernández dijo que en los 16 años que ha trabajado en el museo, esta es la primera vez que los visitantes no son recibidos por obras de arte coloridas y ofrendas. 

La oscuridad y la escultura creada por la artista californiana Claudia Alvarez fueron diseñadas para honrar a los afectados por la violencia armada en todo el país. 

Hernández dijo que los curadores del museo querían que los visitantes se detuvieran y reflexionaran sobre cómo poner un fin a estos actos de violencia ‘sin sentido’. 

Las ofrendas se exhiben en toda la galería principal, incluido el homenaje a los 12 estudiantes y dos maestros que murieron durante el tiroteo escolar en Uvalde, Texas en mayo. Algunas obras de arte conmemoran a las víctimas del tiroteo en Highland Park, así como a las personas afectadas por la guerra entre Ucrania y Rusia. 

Alex Alvarado, el Director de Operaciones del museo dijo que es importante recordar a aquellos que fallecieron trágicamente. También dijo que muchos eventos trágicos son ‘puestos en un segundo plano’.

 “Es por eso que lo estamos trayendo al frente durante nuestra época más popular del año, gente de todo el mundo viene y visita nuestra exhibición, y debemos recordar a los que han fallecido”, dijo Alvarado. 

El Día de los Muertos es una fiesta indígena mexicana que se lleva a cabo el primero y segundo de noviembre. Aunque la muerte aparece en el centro de la fiesta, este día celebra la vida. Es una oportunidad para que la gente recuerde a sus familiares, amigos y seres queridos que han fallecido. Los familiares suelen decorar un altar con objetos que representan al difunto cuando estaba vivo, que van desde sus comidas favoritas, velas, fotografías, flores y más. 

Para Gabriela Rojas, visitante del museo, la forma en que percibe la muerte ha cambiado gracias a esta celebración. 

“De niña le temía a la muerte, pero mi familia celebró el Día de Muertos y he llegado a la conclusión de que la muerte es más que un simple dolor, y estas obras de arte muestran lo hermoso que es recordar la vida de los que han fallecido”, dijo Rojas. 

La 36° exhibición anual del Día de Muertos también recuerda a varias personas de México y Estados Unidos que fallecieron el año anterior a causa de la pandemia y otras calamidades. 

La exhibición muestra un poderoso monumento en el altar de Uvalde que recuerda las vidas de los estudiantes asesinados el 24 de mayo de 2022 durante el tiroteo masivo en la Escuela Primaria Robb. 

Alvarado dice que su altar favorito es el dedicado a las víctimas de Uvalde porque “trae a la luz” a los niños inocentes afectados por la violencia armada. 

Esta cautivadora instalación crea conciencia sobre la violencia y expresa la importancia de recordar a las personas que hemos perdido a lo largo de los años. Esta exposición, puede conectar emocionalmente a los visitantes con las víctimas que fueron honradas a través de fotografías y obras de arte.

Ofrendas como la “Ofrenda puertorriqueña al cine mexicano en blanco y negro: de Santa a la Roma” creada por Antonio Martorell han sabido dejar huella en los invitados. Esta pieza muestra tanto una ofrenda tradicional, como el uso de la tecnología interactuando en un solo lugar.

 A través de este museo, te sumerges en el Día de los Muertos, antes de ingresar a la tienda de regalos, te enfrentas a un altar interactivo donde los invitados pueden escribir el nombre de un ser querido fallecido para recordar su vida. En general, vale la pena ir y ver la exhibición en persona, ya que su importancia no se puede capturar solo con fotografías.