Una cama, una silla, paredes forradas con periódicos y una mujer que ya no recuerda quién es se exhiben en el escenario.
En solo 90 minutos, “Las delicadas lágrimas de la luna menguante” transforma esta escena en un evocador recuerdo de periodistas latinas quienes fueron asesinadas por denunciar injusticias contra los derechos humanos, incluyendo temas como el feminicidio, el narcotráfico y la corrupción gubernamental.
Escrita y protagonizada por la periodista y actriz venezolana Rebeca Alemán, y dirigida por la galardonada productora Iraida Tapias, la obra, entrelaza escritura poética con el tormento y la resiliencia del dolor y la recuperación.
La obra es producida por Water People Theater, una compañía dirigida por inmigrantes y latinas, con sede en Chicago. Tuvo su estreno mundial en el Steppenwolf Theater en 2019 y ha regresado a la ciudad en el Instituto Cervantes, una organización sin fines de lucro que promueve la enseñanza del idioma español a nivel mundial.
La historia se basa en las hechos reales de periodistas latinas asesinadas como Regina Martínez Pérez, Miroslava Breach, Yessenia Mollinedo, Sheila Johana García Olivera, entre muchas otras.
“Las delicadas lágrimas de la luna menguante” narra la recuperación de Paulina, una periodista de derechos humanos ficticia, quien está en proceso de recuperar su memoria y habilidades de movilidad luego de haber caído en coma tras un brutal ataque.
Bajo el cuidado de Rodrigo, su amigo y compañero de trabajo, Paulina experimenta ciclos de recuerdos traumáticos. Las memorias de su hija, madre y su amiga, Patricia, la ayudan a reconstruir su identidad y a entender por qué fue atacada.
“Rebeca hizo una investigación en México durante cinco meses. Entrevistó a Patricia, la amiga de Miroslava, quien fue asesinada”, dijo Tapias. “Todo lo que dice [en la obra] es cierto. Es admirable cómo [Rebeca] pudo escuchar a las madres y familias de esas víctimas”.
A lo largo de la obra, el público se identifica con la indignación de Paulina por las víctimas de feminicidio y las injusticias hacia los pueblos indígenas. Alemán también incorpora lenguaje poético en el diálogo haciendo de la luna, un motivo central en el camino de Paulina hacia la reconciliación con el periodismo opresivo y Rodrigo, de quien descubre que le oculta algo.
“Es una obra difícil que exige mucho emocionalmente”, dijo Tapias. “Es exigente para todos, pero especialmente para los actores. Especialmente para Rebeca. Lo que hace en el escenario es hipnotizante”.
Esta toma de escena marca la tercera vez que Tapias dirige la obra. A lo largo de sus 50 años de experiencia en el teatro, Tapias ha desarrollado nuevas técnicas, incrustando “secretos” en el texto de la obra que revelan su proceso creativo.
“En cada montaje nuevo descubro más cosas”, dijo. “Me adentro mucho más en la obra. Es una obra escrita desde el alma”.
Aunque la obra por sí sola ya tiene mucho peso, una exhibición de arte adicional, junto al teatro, revela los rostros reales detrás de la historia de Paulina, mostrando varias imágenes y vídeos de periodistas asesinadas.
Un maniquí de plástico, desnudo y lleno hasta la cintura de billetes, se presenta al público con temas de corrupción y cuerpos femeninos desechados, mientras recortes de periódicos superpuestos conectan un caso de asesinato tras otro.
Esta exhibición fue curada por Marisabel Muñoz directora de arte, escenografía, utilería y vestuario de Water People Theater. Esta provoca introspección tanto antes como después de la presentación.
“Lo que buscamos es tocar el alma y los temas que están ahí”, dijo Tapias. “El teatro toca tu alma y la gente siente empatía con el actor y la acción dramática”.
Con poderosa convicción, vulnerabilidad y narrativa, “Las delicadas lágrimas de la luna menguante” da vida a las almas de periodistas que buscaban justicia y encontraron la muerte. Al hacerlo, los espectadores también sienten la vitalidad de estas voces silenciadas pero expresivas que viven por siempre en la historia latina.
“Las delicadas lágrimas de la luna menguante” se estará presentando en el Instituto Cervantes hasta el 4 de octubre de 2024. Para más detalles presione aquí.