En menos de 50 días llegarán las elecciones presidenciales de los Estados Unidos, algo que cambiará la historia debido a los tiempos de incertidumbre que nos encontramos ahorita. 

A principios de este mes, La Comisión de Debates Presidenciales anunció a Chris Wallace, Susan Page, Steve Scully y Kristen Welken como moderadores de los próximos debates– omitiendo un puesto para un periodista latino. 

Esta decisión es hiriente para nuestra comunidad latina al no tener un moderador que nos represente. 

“En pocas palabras: es una abdicación de su responsabilidad de representar y reflejar una de las comunidades más grandes e influyentes de los EE. UU. “, comentó Randy Falco, presidente y director general de Univisión. 

Los latinos constituyen más de 32 millones de individuos registrados para votar este 2020, convirtiéndolos en uno de los bloques de votantes más grandes de la nación. Esta cantidad hace que nuestra comunidad sea un objetivo esencial para ambos candidatos de la presidencia. 

Al no tener un moderador latino, no brindamos la luz necesaria a los problemas que realmente necesitaban ser discutidos en esta elección. Miembros de nuestra comunidad latina batallan con una vida de incertidumbre. Algunos con inquietud de su estatus migratorio, otros con dudas de su trabajo e inseguridad de su cuidado de salud. 

La omisión de un periodista latino en los debates presidenciales es un rechazo al progreso de nuestra comunidad. 

Aunque esta decisión no fue tomada por los candidatos, esto no es una excusa justificada para que nuestra comunidad sea excluida de algo tan importante como las elecciones presidenciales. 

Lo que necesitamos es transparencia, representación, y un conocimiento extendido de los problemas que enfrentan los latinos día a día.  

Pero esta lucha por un asiento en la mesa no es nueva ni la primera. En julio 2020 la fundación de la comunidad latina empezó una petición para demandar que uno de los moderadores sea latino, considerándolo un movimiento esencial para cumplir las necesidades y metas del electorado estadounidense. Estamos en tiempos de crecimiento, donde todos merecen ser incluidos e invitados a ser parte de la discusión de nuestro país. Esta exclusión es solamente otra forma de polarizar a la comunidad latina. 

Al fallarle a la comunidad latina, el presidente de la Asociación Nacional de periodistas hispanos, Hugo Balta, contestó que al no responder a las demandas de la comunidad esta decisión desvanece a los latinos con la falta de un moderador de la comunidad. 

“Tres co-presidentes blancos de la Comisión de Debates Presidenciales han negado una vez más a los hispanos y latinos un asiento en la mesa cerca de las elecciones de 2020”, dijo Balta. “Es absurdo mirar el estado de nuestro país y las comunidades cada vez más polarizadas en todo el país y no quedarse preguntándose cómo es posible que nuestra comunidad permanezca excluida”.

Sin duda, hay varias opciones y oportunidades para darle luz a la comunidad y platicar sobre los asuntos que nos afectan día a día. 

Al no incluir un periodista latino/a, promueve una narrativa que no estamos a la altura como comunidad y como profesionales para participar en diálogos que cambian el clima político de este país. Esto entonces engendra una negligencia hacia nuestra comunidad que continuamente margina a nuestra comunidad y nos hace creer que no importamos– y esa no es nuestra historia.  

La realidad es que la comunidad latina tiene poder en sus números, con más de 60 millones de personas en el país, no cabe duda que dejamos nuestra huella en la economía del país, la fuerza laboral sindical y estamos construyendo generaciones de latinos que están allanando el camino del progreso en la comunidad y para la comunidad.

Varios periodistas de la comunidad usaron sus plataformas de twitter para destacar que tan grande es este problema. El talento está ahí, los individuos están ahí lo único que falta es la decisión y el permiso de participar en la discusión que afecta el país entero. 

Esta comunidad de trabajadores tenaces e individuos que lo han sacrificado todo para un país de oportunidad se han merecido una representación en todos los aspectos cívicos.

Somos el liderazgo que impulsa tantos aspectos de este país. 

Una vez más, sabemos que hay mucho más espacio para luchar y demandar esa voz que merecemos.