Al presentarte en una aula o a una nueva persona, decir tu nombre y tus pronombres personales es algo que se está normalizando. Ya que la discusión del género neutral es algo que nuevas generaciones se están adaptando. Al ser un tema que las generaciones mayores ya están practicando y utilizando en sus conversaciones, ¿cuándo sería el momento de enseñarles a los niños y la nueva generación que esta es la nueva normalidad? Usar los pronombres dentro de las aulas se deberían convertir en una normalidad.

En los últimos años, activistas y lingüistas en los Estados Unidos y Latinoamérica han creado un diálogo sobre la inclusión en el lenguaje del español. El español es un idioma mayormente identificado con géneros como el masculino o el femenino. 

Lingüistas y activistas pueden discutir que el uso de palabras neutrales en el español se han estado utilizando más como otros sustantivos y pronombres que son de género inclusivo como Latinx y “Latine”.

Diana Ramirez, maestra de educación primaria en las escuelas públicas de Chicago, dijo que a veces la administración escolar no da instrucciones directas en cómo manejar un salón de clase. Entonces es el deber del maestro construir un ambiente acogedor dentro del salón. 

“Con el cambio de generaciones, los pronombres son algo crucial en mi salón de clases. Me doy cuenta de que mis alumnos más jóvenes son mucho más inocentes, ¿quién soy yo para decirles quiénes quieren ser?”, comentó Ramirez. “Siempre me aseguro que mis estudiantes sepan que ellos pueden ser quienes quieren ser hoy, mañana y siempre. Mi rol es ser su maestra y enseñarles que tienen la posibilidad de ser quienes quieran ser sin limitación”. 

Un estudio de Pew Research Center determinó que solo el 23 por ciento de los hispanohablantes en los EE. UU. han escuchado el término “latinx” y solo el 3 por ciento usan el término para describirse a sí mismos.

Hay un apoyo para avanzar hacia un español que sea género neutral, pero no hay evidencia que se esté adoptando. Ahí es donde maestros y educadores profesionales pueden tomar el papel de ser los individuos que cambian la “normalidad”. Al construir una plataforma que dé la bienvenida a movimientos neutrales para evitar los estereotipos y combatir el machismo que daña nuestras comunidades. 

Daisy Lamas-Guzman, una estudiante universitaria de educación primaria, comenta que su meta al convertirse en maestra es poder brindarles a sus estudiantes la mejor educación con un ambiente que los deja crecer como personas, tan pequeños que sean. 

“Todos tienen la habilidad de crear y si mis estudiantes se sienten más cómodos con un pronombre en específico. Yo tengo el deber de respetarlos y enseñarles a sus compañeros de clases hacer lo mismo”, dijo Lamas-Guzman. “Quiero que mi aula sea un espacio seguro que no restrinja a mis alumnos sino que los ayude a crecer y ser ellos mismos”.

Los niños son la fundación de nuestro futuro y ahora que estamos determinando el uso de pronombres y lenguaje neutral, ¿ por qué no empezar de cero y empezar con nuestros niños? 

Ya que ellos determinan nuestro futuro y avance como individuos.