Cuando uno quiere comprar un regalo uno va al centro comercial y compra de compañías grandes y no de los negocios propios de nuestra comunidad. ¿Pero sabías que las pequeñas empresas suelen tener una gama más amplia de productos o se especializan en ofrecer experiencias de cliente únicas o personalizadas? Las pequeñas empresas también crean nuevas posibilidades de empleo y toda empresa grande empieza como una pequeña. Los negocios pequeños ayudan proporcionando crecimiento e innovación a la comunidad donde están ubicados.

Es importante comprar de los negocios pequeños porque el dinero se devuelve a la comunidad local. Tuve la oportunidad de hablar con propietarios sobre la importancia de comprar localmente.

Christian Pizano, un joven de 18 años, empezó su negocio al principio de la pandemia del Covid-19. Él creó una línea de ropa llamada “St. Judas” y anunció su negocio en sus redes sociales, específicamente Instagram.

“El nombre San Judas fue creado en base a varios factores. Cuando estaba en el proceso de creación de mi marca, quería explorar las ideas de la religión y lo que significa para mí como persona”, dijo Pizano cuando se le preguntó por qué eligió el nombre San Judas para su marca de ropa. “Sentí que la historia de Judas tiene una conexión notable con lo que quiero explorar en mi marca y me sentí apto para ser el nombre de mi marca.”

Cuando Pizano comenzó su negocio, no sabía nada sobre cómo hacer ropa. No fue hasta su segundo año que fue a un festival de música y habló con propietarios de marcas locales sobre cómo empezar el proceso y cómo iniciaron su negocio. En ese punto es cuando comenzó a interesarse más en crear algo propio. Sabía lo que quería hacer y la visión que quería perseguir, pero todavía estaba un poco perdido acerca de cómo empezar. No fue hasta un año después que conoció a Diego Audiffred, un diseñador emergente y amigo cercano, quien le ayudó a imprimir un lote de camisetas y le enseñó el proceso de serigrafía. De ahí su negocio ha crecido.

Iraís, Diana e Itzel Elizarraraz son tres mujeres latinas que tienen también un negocio de ropa llamado “Sin Título” que se enfoca en el poder de ser latino. Le pregunté sobre el nombre del negocio y por qué lo eligieron.

“En realidad, era un nombre temporal mientras descubríamos el posicionamiento de nuestra marca. El nombre se traduce como Sin Título, que es lo que éramos cuando comenzamos el chat grupal,” dijeron las hermanas Elizarraraz. “Después de que nos dimos cuenta de que todos nuestros diseños no estaban clasificados únicamente en un grupo específico de temas, sino en temas ilimitados, pensamos que Sin Título era perfecto”.

Sin Título ha logrado crecer como negocio y han expandido su colección de ropa.

Aparte de los dueños de los negocios un artista de Chicago, Caitlin Cortez, compartió sobre su negocios locales favoritos: “Algunos de mis locales favoritos para apoyar serían: Taco Sublime, Claü, y El Secreto del Sabor”.

Estos son unos de los pocos negocios asombrosos que Chicago ofrece. Muchos negocios pequeños y locales pasan desapercibidos y merecen ser tratados de la misma manera que cualquier empresa grande. Es importante comprar localmente porque necesitamos poder apoyar a nuestra comunidad de cualquier manera que podamos.