Los residentes del lado oeste de Chicago organizaron el People’s Music Fest en la esquina de Cermak y Marshall Blvd. como parte de sus continuos esfuerzos para eliminar Riot Fest y otros mega festivales de Douglass Park.

Los residentes han expresado sus preocupaciones a lo largo de los años, incluso, en un foro abierto del Distrito de Parques de Chicago este agosto. Allí muchos afirmaron que los mega festivales causan una mayor congestión del tráfico, interrupción de hospitales de trauma, falta de acceso al parque, preocupaciones de seguridad pública y el desplazamiento de ligas de fútbol locales. 

En People’s Fest,  los miembros de la comunidad escucharon música en vivo, comieron bocadillos, y pintaron mientras convivían cerca de señales clavadas en el césped que decían “NO MEGA FESTIVALES EN DOUGLASS PARK!”

Riot Fest es un festival anual de punk rock en Chicago con grandes bandas como My Chemical Romance y Misfits que actuaron este año. 

Emily, una residente de la comunidad, que no quiso revelar su apellido, dijo que asistió al People’s Fest para “luchar por nuestra comunidad y nuestra juventud”.

La oposición de los residentes de North Lawndale y Little Village contra Riot Fest comenzó en el 2015 cuando fue reubicado de Humboldt Park sin consultarle a la comunidad. 

Heatwave y Summer Smash, de Lyrical Lemonade, son dos festivales adicionales que se llevan a cabo en Douglass Park, lo que hace que el parque esté restringido durante 47 días del verano, cada año, según los residentes. 

Brianna Tong, una de las cantantes que se presentó en el People’s Fest, dijo que las letras de sus canciones punk exponen la falta de atención de los funcionarios gubernamentales hacia los miembros de la comunidad. 

“El dinero recaudado [por Riot Fest] vuelve a los concejales”, dijo. 

The Chicago Reader informó que Riot Fest entregó decenas de miles de dólares a comités de acción política vinculados a concejales cuyos distritos incluyen Douglass Park, incluido Ald. George Cardenas (12) y ex Ald. Michael Scott Jr. (24). Desde 2019, Cárdenas ha aceptado $18,000 en donaciones políticas de compañías de festivales de música.

Más allá de la aceptación de donaciones políticas por parte de los concejales locales, los registros del Distrito de Parques de Chicago muestran que Riot Fest solo pagó $233,508 de los $2.35 millones requeridos en cuotas de permisos en 2015, un descuento, aproximadamente, del 90% de acuerdo con la Ley de Libertad de Información (FOIA, por sus siglas en inglés) obtenida por The Reader. 

El Distrito de Parques de Chicago no respondió las preguntas sobre la reducción de las tarifas de los permisos a tiempo para esta publicación. 

Ana Solano, una integrante de Únete La Villita, una organización del West Side que desaprueba los mega festivales, dijo que los grandes descuentos que el distrito de parques le dio a Riot Fest es dinero que no se devuelve a la comunidad. 

“¿Para quién son realmente estos festivales? No son para nosotros”, dijo. 

Juan Otalora, un miembro del personal de Riot Fest, dijo que él apoya los mega festivales porque le brinda oportunidades laborales.

“La paga es excelente, pero las oportunidades de establecer contactos son aún mejores”. De los múltiples  festivales en los que trabaja a lo largo del año, “este es mi evento favorito para trabajar”, ​​dijo. 

Riot Fest ofrece puestos de trabajo a los residentes locales durante los tres días del festival, cada año. 

Edith Tovar, una integrante  de la Organización de Justicia Ambiental de La Villita (LVEJO), dijo que a pesar de los trabajos que ofrece Riot Fest, la comunidad sigue sin recibir alguna inversión o mejora.

“Que los promotores de conciertos ofrezcan trabajos temporales es una broma, eso no es una mejora económica, eso no va a ayudar a la comunidad y a nuestros vecinos a salir de la pobreza”, dijo. 

Nicole Delgadillo, otra seguidora que asistió al Riot Fest y residente de Brighton Park, dijo que ha asistido al festival cuatro veces y nunca ha tenido una mala experiencia. “Es uno de esos festivales que no se sale de control, es un ambiente agradable”, dijo. 

Riot Fest atrae alrededor de 45,000 personas diarias, y dona entradas cada año a la comunidad. 

Emily, que se opone a Riot Fest, dijo que su frustración dentro de la comunidad va más allá de la interrupción que causan los festivales.. 

“Luchamos constantemente por aire limpio, recursos comunitarios, atención médica, vivienda y seguridad”, dijo. 

En medio de un creciente rechazo de la comunidad, los líderes del distrito de parques anunciaron el 14 de septiembre, durante una reunión de la junta directiva, que cambiarán su código, por lo que esta debe aprobar los eventos con más de 10,000 asistentes diarios, según el Chicago Tribune. 

“Riot Fest necesita entender que no son bienvenidos aquí, nunca fueron invitados por la gente y nuestra gente puede prescindir de los grandes festivales que vienen aquí”, dijo Emily.