El 8 de mayo, humo blanco salió de la Basílica de San Pedro y las campanas repicaron para anunciar al cardenal Robert Prevost como el nuevo papa, quien adoptó el nombre de Leo XIV.
La elección papal de 2025 conectó con las personas, marcó nuevos precedentes, y la película Cónclave de 2024 tuvo un gran regreso a la cultura pop tras la elección.
Mientras que los medios de comunicación se centraron en que el papa es estadounidense y es nacido en Chicago, los miembros de la comunidad peruana en la ciudad se sintieron emocionados por una razón completamente distinta.
Tras ser elegido, el Papa Leo XIV mencionó explícitamente a Chiclayo —la ciudad donde fue nombrado obispo por el Papa Francisco en Perú— en su primer discurso. Las búsquedas en Google de Perú y Chiclayo aumentaron después de ese día.
Verónika Bustamante, cónsul general del Consulado Peruano en Chicago, dijo que estaba “muy sorprendida” al enterarse de que el nuevo papa era un ciudadano naturalizado del Perú.
Mientras veía las noticias en televisión, sus amigos comenzaron a mandarle mensajes sobre la noticia.
“Muchos amigos me enviaron mensajes diciendo que ya estaban buscando en el mapa [preguntando] dónde está Chiclayo”, dijo.
Al igual que Bustamante, muchos peruanos en Chicago se enteraron viendo las noticias en televisión, navegando en redes sociales y siguiendo actualizaciones en vivo en páginas digitales de noticias.
Ana Arias, gerente de auditoría interna en SoFi, una empresa de servicios financieros, fue una de ellas. Seguía las novedades del cónclave en el internet.
Arias dijo que estaba “bastante emocionada” de saber que el nuevo papa es de Chicago y también ciudadano peruano naturalizado, porque esto lleva al Perú a un “escenario mundial”.
“Creo que la mayoría de la gente solo conoce al país por Machu Picchu”, dijo Arias, quien emigró de Perú a Chicago a principios de los 2000.
La elección del papa “hace que la gente sea un poco más consciente” de otras cualidades del Perú, dijo Arias.
“Desde su comida, sus playas, todo, tiene mucho que ofrecer”, agregó.
Arias creció asistiendo a una escuela católica en Perú y continúa practicando la fe católica. De hecho, el año pasado se casó en una iglesia en Chicago.
“Nunca piensas que vas a estar conectada a algo que está tan presente en el escenario mundial”, comentó.
Sin embargo, según Bustamante, las celebraciones no se limitaron solo a los peruanos católicos.
“Todos los peruanos celebramos como si hubiéramos ganado la Copa del Mundo”, dijo.
Bustamante comentó que aunque gran parte del país es católico, la dedicación del papa a ayudar a personas en situaciones de desventaja socioeconómica podría renovar la fe de muchos.
“Vimos muchas fotos de él durante su misión en Perú. Ha estado muy cerca de muchas familias, de niños. Lo vimos sirviendo comida él mismo a los niños. Lo vimos con botas de goma en medio de un río”, dijo Bustamante. “Eso, creo, es lo que la gente valora de él”.
La dedicación del Papa Leo XIV a las personas en pobreza es también lo que entusiasma a Arias sobre su camino en el Vaticano.
“Espero que continúe con su misión de realmente abogar por las personas que viven en la pobreza en países tercermundistas, no solo en Perú”, dijo Arias.
Sandra Robles, física establecida en Chicago, dijo que se siente identificada con el papa por sus experiencias multiculturales y doble ciudadanía. Robles dijo haber vivido en Estados Unidos, España y Perú.
“Es algo moderno que tengamos un papa con doble ciudadanía, y habiendo estado en esa situación, me identifico totalmente”, comentó Robles.
Aunque Robles no es católica, dijo que le alegra que el papa no fuera únicamente ciudadano estadounidense. El hecho de que también sea peruano aumentó su interés en los resultados de la elección papal.
“Tengo mis opiniones personales sobre la Iglesia y el Vaticano”, dijo Robles. “Pero creo que ha vivido bastante tiempo en el Sur Global como para entender los problemas del mundo en desarrollo. Así que eso hace que se balancee bastante”.
Robles comentó que escuchó que muchas personas en Perú están entusiasmadas con la posibilidad de que el papa visite el país.
“Desde el presidente hasta el ciudadano más humilde. Todos estaban celebrando al nuevo papa”, dijo Robles.
La rápida integración del Papa Leo XIV en las tradiciones culturales y sociales del país ha hecho que la comunidad peruana en Chicago espere con ilusión su visita a la ciudad estadounidense.
“Los peruanos en Chicago están, como ya dije, muy emocionados”, dijo Bustamante. “Ya expresaron su deseo de organizar una actividad cuando el Papa venga a visitar Chicago algún día”.