Redadas de ICE disminuyen actividades de negocios en La Villita
La Villita es el segundo mercado comercial con mayor ingreso en Chicago después del Magnificent Mile. Hay 1,000 negocios, incluyendo 500 tiendas ubicadas a dos millas a lo largo de la calle 26. Es un hogar para la población más grande de mexicano-americanos del medio-oeste y genera aproximadamente $900 millones anuales. Pero, recientes leyes migratorias de la Casa Blanca podría cambiar eso.
Según Robert Stokes, profesor de la Universidad DePaul que se especializa en revitalización económica y áreas comerciales urbanas, dijo que comunidades como La Villita dependen de una corriente constante de inmigrantes.
“Los que ‘lo logran’ se mudan a suburbios”, dijo Stokes. “Sería malo para los negocios si los recién llegados dejarán de venir”.
Los efectos económicos de la aplicación de la ley migratoria se han presenciado anteriormente–cuando la Inmigración y el Control de Aduanas (ICE) hizo redadas por la ciudad, los residentes temían salir de sus hogares.
El concejal Mike Rodríguez, quien representa al distrito 22 que incluye el vecindario de La Villita, dijo que “la pérdida de la población en La Villita es real”.
Durante el censo de 2000, La Villita tenía 91,000 residentes pero actualmente tiene 79,000 residentes. “La red de migración de México hacia los Estados Unidos ahora es negativa”, dijo Rodríguez, lo que podría atribuirse a esta disminución en la población.
Durante los meses de las redadas de ICE, Rodriguez sintió que veía menos actividades en la calle 26 y escuchó que en las empresas también habían menos negocios. “Había varios que sintieron que era un pueblo fantasma en la calle 26”, dijo Rodríguez.
Pero, el concejal Rodríguez dijo que no hay datos disponibles para asegurar esto de ninguna manera.
Rosa Cortés, quien ha vivido toda su vida en La Villita, dijo que los residentes “siguen su vida diaria lo mejor que pueden”, dijo Cortés. “Pero eso no quiere decir que ellos no están asustados o preocupados por lo que les pueda suceder con respecto a ICE y la inmigración”.
En medio de las redadas de deportación del verano pasado las propiedades en La Villita bajaron en gran valor, que no se pronostica que se recupere por completo hasta febrero de este año.
Sin embargo, Chicago, en promedio, registró una disminución en los valores de las propiedades aproximadamente al mismo tiempo, según los datos registrados de Zillow sobre las ventas realizadas el pasado verano.
Tener una disminución sutil en el valor de la propiedad no es demasiado preocupante para el concejal Rodríguez, por miedo de la gentrificación.
“Queremos mantener un delicado equilibrio entre el desarrollo sin desplazamiento”, dijo Rodríguez.
El concejal Rodríguez espera que la retórica de inmigración del presidente Donald Trump tenga una consecuencia negativa en su campaña de reelección. “Espero que las personas de bien puedan impulsar la acción”, el añadio. “No creo que sea saludable tener menos inmigrantes”.
“Nuestra comunidad es la base de la economía de nuestra ciudad”, dijo Rodríguez. “Nuestros residentes trabajan en la industria de servicio, en la ciudad, ellos son empresarios de la ciudad. La calle 26 se llama la segunda Magnificent Mile por el gran ingreso de taxes que generamos a través la ciudad de Chicago. Necesitamos ayudarlos en vez de seguirlos”.