Las clases presenciales están de regreso, pero los padres, maestros y estudiantes aún se preocupan por la seguridad del uno al otro. ¿Será suficiente el acuerdo entre las Escuelas Públicas de Chicago (CPS) y el Sindicato de Maestros de Chicago (CTU)?

Las negociaciones entre CPS y CTU duraron cinco días, dejando a los estudiantes sin comunicación con sus maestros y muchos padres con prisa buscaban dónde podrían quedarse sus hijos mientras se pasaban las clases presenciales. 

Según cifras de CPS, entre la semana de enero 16-22 hubo 659 casos reportados entre adultos y 2,201 entre estudiantes, incluido están registrado pruebas realizadas dentro de una escuela y los autoinformados fuera de una escuela. También el 22 de enero se reportaron 968 adultos y 22,057 estudiantes bajo cuarentena/aislados.

Durante las negociaciones entre CPS y CTU, los padres y estudiantes se sintieron excluidos de la conversación.

“Se debe tomar en cuenta la opinión de los padres porque nuestros barrios son menos favorecidos”, dijo Luz Maria Flores, una madre de un estudiante de la escuela Seward Elementary. “CPS y CTU deben tomar las medidas de seguridad necesarias que permitirán que nuestros estudiantes regresen a clases de manera segura”. 

Flores dijo que su familia fue impactada fuertemente por el Covid-19 ya que su papá murió.

“Hemos pasado por un tiempo difícil”, dijo Flores. “Tuvimos un poco de dificultad en decidir si iba a regresar mi hijo a las clases presenciales”.

Flores dijo que su familia tomó la decisión de vacunarse y así sentirse más segura de que su hijo regresará a las clases en persona.

“Es la única opción que tenemos si queremos combatir el Covid-19”, dijo Flores. “La vacuna es por decisión propia, pero cuidarlos es de todos”.

El sitio web de CPS brinda información sobre la vacuna y dónde obtenerla. A Flores le gustaría ver más información sobre los estudios realizados para la vacuna para impulsar una comunidad segura.

“Me gustaría que las escuelas pudieran facilitar talleres sobre la ciencia de las vacunas”, dijo Flores. “Así más padres se sentirán bien con que sus hijos regresen en persona”.

Aunque los miembros de CTU votaron a favor de aceptar el acuerdo tentativo con el equipo de negociación de las Escuelas Públicas de Chicago y la alcaldesa de Chicago Lori Lightfoot el 12 de enero, los miembros de CTU dicen que se puede hacer más.

El acuerdo incluye un aumento en el suministro de máscaras KN95 proporcionadas por el distrito a las escuelas, métricas sobre casos del Covid-19 y pasos operativos para cambiar la instrucción de aprendizaje en persona a aprendizaje remoto e incentivos monetarios para contratar sustitutos adicionales.

Omar Ramirez, decano de Richards Career Academy y miembro de CTU, dijo que la lucha no ha terminado; el sindicato continuará exigiendo medidas de seguridad mientras continúa la pandemia del Covid-19.

“Yo voté [con total transparencia] en contra del acuerdo porque sentí que deberíamos haber seguido negociando”, dijo Ramírez. “Hay más por hacer… No estaba contento con el acuerdo”.

Ramírez menciona específicamente que en Richards Academy debe haber mejores pautas en términos de lo que se requeriría para cambiar al aprendizaje remoto.

También menciona que debe haber una mejor manera de acceder a maestros sustitutos cuando sea necesario. 

“Necesitamos mano de obra para operar o solo estamos acogiendo niños”, dijo Ramírez.

Una de las pautas establece que si al menos el 40 por ciento de la población de una escuela está en cuarentena, la escuela se volverá remota.

Ramírez dijo que las métricas de CPS para cambiar de aprendizaje en persona a remoto son inconsistentes.

“Por lo que sabemos, podemos estar detectando una fracción de los casos”, dijo Ramírez. “Nos estamos quedando con nuestros propios recursos, uno sin la capacidad, las herramientas o la experiencia para realizar un seguimiento de los que están en cuarentena o dan positivo por el Covid-19.”

Según el futuro, Ramírez espera que la presión y el empuje por un aprendizaje seguro no se detenga ahora.

“Me gustaría que mi sindicato no baje la guardia en cuanto a que esto será un proceso continuo y por eso tenemos que mantener la presión contra CPS”, dijo Ramírez. “En el momento en que bajemos la guardia, el alcalde y CPS implementarán las cosas unilateralmente”.

En términos de ver algo diferente en la lucha por espacios de enseñanza y aprendizaje más seguros es también clave tener concejales locales para estar en el lado correcto de la historia.

“Creo que para avanzar es importante que también ejercemos presión sobre nuestros concejales”, dijo Ramírez. “Sentí que muchos de ellos estaban en silencio”.

En un esfuerzo por hacer oír su voz, los estudiantes de CPS dijeron estar presentes.

Organizado por Radical Youth Alliance de las Escuelas Públicas de Chicago (Chi-RADS), estudiantes de CPS abandonaron sus clases en respuesta a la decisión del distrito de regresar a los cursos en persona durante la altura de la variante Omicron, sin escuchar las necesidades personales y académicas de los estudiantes.

Yasmine Tarr, senior de Whitney Young, dijo que siente que los jóvenes de CPS no están siendo considerados en las negociaciones en curso que, en general, también los afectan directamente.

“Tenemos relatos de primera mano”, dijo Tarr. “Siento que, debido a nuestras experiencias, deberíamos opinar sobre lo que está sucediendo”.