Desde la toma de posesión del presidente Donald Trump a principios de este año, muchas personas de comunidades de color y aquellas que son indocumentadas se han sentido inquietas.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) emitió un comunicado tres días después de que Trump asumiera el cargo, detallando sus esfuerzos para arrestar y deportar a lo que llaman “extranjeros ilegales” a través de redadas masivas realizadas por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE. UU. (ICE, por sus siglas en inglés). Chicago es una de las principales ciudades como objetivo en este esfuerzo, generando miedo y desesperanza en comunidades que antes eran vibrantes.
Rene, un trabajador de la construcción que solo usa su primer nombre por temor a represalias legales, vive en el vecindario de Back of the Yards en Chicago. Llegó a EE. UU. desde Chihuahua, México, hace unos años y, desde que se enteró de los nuevos esfuerzos de deportación dice que se siente temeroso por él y su familia.
Los rumores y la desinformación sobre la actividad de ICE en los vecindarios aumentan el miedo y la ansiedad que él y su familia sienten, dijo Rene. Además, también está frustrado por el hecho de que personas en su comunidad difunden información falsa en línea.
“Son nuestros propios hermanos hispanos los que hacen que todo sea más alarmante de lo que es”, dijo Rene.
Después de que el DHS anunciara que ICE y otras agencias federales realizarían arrestos selectivos en enero, imágenes e información sobre avistamientos de ICE inundaron internet. Para combatir la desinformación, Rene dijo que verifica todo lo que ve en línea.
“Me mantengo atento a las noticias y evalúo todo lo que sale”, dijo.
Diana Acevedo, una diseñadora gráfica que asiste al Consejo de Vecinos de Back of the Yards para clases de ballet folclórico, dijo que no saber a quiénes pueden afectar las redadas de ICE ha hecho que las cosas sean “aún más aterradoras”.
“Ni siquiera sé si van a quitar ciertas ciudadanías, y ¿desde qué fecha? ¿Eso me incluye a mí? ¿A mi amigo? ¿A mis familiares”? dijo.
Sumado a la desinformación en línea, Acevedo dijo que el miedo también ha detenido reuniones comunitarias.
Sin embargo, conocer sus derechos le ha dado algo de tranquilidad. Se siente más segura de que existen métodos para protegerse y abogar por ella misma, dijo Acevedo.
“Aunque de alguna manera nos veamos atrapados en esa situación, saber y abogar por nosotros mismos, seguir adelante en lugar de simplemente creer lo que se dice, incluso si es desinformación de alguien que creemos que es una autoridad”, dijo.
Acevedo agregó que se siente “muy triste y decepcionada” por los desarrollos recientes en los esfuerzos de deportación masiva.
“Sé que he crecido aquí toda mi vida. Conozco a la gente de la zona. Sé lo trabajadores que somos”, dijo Acevedo.
Organizaciones como la Coalición de Illinois para los Derechos de Inmigrantes y Refugiados (ICIRR, por sus siglas en inglés) y Comunidades Organizadas Contra las Deportaciones (OCAD, por sus siglas en inglés) aseguran que las personas reciban apoyo, información verificada y conozcan sus derechos legales.
“Conocer tus derechos es empoderador, unirse como comunidad es una forma de seguridad”, dijo Brandon Lee, director de comunicaciones de ICIRR.
Lee dijo que el proceso de verificación de ICE comienza justo después de que se recibe una llamada en la línea de emergencia. Luego, la organización envía a miembros capacitados de respuesta rápida a los vecindarios.
Hablarán con las personas del vecindario, averiguarán si alguien ha sido arrestado y conectarán a sus familias con servicios legales, dijo Lee.
OCAD e ICIRR colaboran y coordinan 23 grupos de respuesta rápida en toda la ciudad. Recogen toda la información posible de las personas que hacen el reporte.
Antonio Gutiérrez, cofundador y coordinador estratégico de OCAD, dijo que la organización trata cada llamada que reciben en su línea de emergencia como una actividad confirmada de ICE.
“Cuando llega un aviso a OCAD… lo comunicamos a los líderes de cada uno de esos grupos y les informamos que esto está sucediendo. Les damos toda la información que nos fue presentada”, dijo Gutiérrez.
Cuando OCAD recibe videos de redes sociales que pueden haber sido previamente verificados, Gutiérrez dijo que notifican a la persona que publicó el video sobre su exactitud.
Gutiérrez dijo que el objetivo de estas redadas de ICE y los esfuerzos de deportación es generar “miedo y desesperanza” en las personas. Sin embargo, ven que la gente está utilizando los consejos de OCAD a su beneficio.
“Esto solo demuestra que la información está funcionando”, dijeron. “No estamos enseñando cómo evitar el arresto. Les estamos enseñando [sus] derechos”.
OCAD e ICIRR también brindan apoyo en casos donde se realiza un arresto, ofreciendo apoyo legal, recopilando evidencia importante y trabajando juntos con la comunidad para preparar una defensa de deportación.
“Un arresto durante una actividad de ICE no es el fin del juego. De hecho, es el comienzo en muchos casos”, dijo Gutiérrez. “Si las personas son arrestadas o detenidas por ICE, queremos que también nos llamen para que podamos encontrar formas de apoyarlos”.
Un miembro de la comunidad de Back of the Yards, que trabaja en una carnicería y prefiere mantenerse en el anonimato por razones de seguridad personal, dijo que conocer sus derechos y conocer a los grupos locales le ha dado una sensación de seguridad.
“No estás con las manos atadas; hay formas de navegar por estas situaciones”, dijo.
Alondra M. Castañeda contribuyó con la redacción y traducción de esta historia.